El gas natural es una de las fuentes de energía más utilizadas en los hogares españoles, especialmente para la calefacción y el agua caliente. Sin embargo, muchas veces no sabemos cómo aprovechar al máximo sus ventajas, ni cómo cuidar de nuestra instalación para evitar riesgos y problemas.
En este artículo te damos algunos consejos prácticos para optimizar el consumo de gas natural, así como para realizar revisiones oficiales de gas periódicas que garanticen tu seguridad y la de tu familia, proceso en el que es fundamental valerse de los servicios de una empresa experta y certificada en instalación en gas y calefacción, que te ofrezca soluciones integrales para tu hogar o negocio.
Consejos para ahorrar en calefacción y agua caliente con el gas natural
Para sacar el máximo partido a una instalación de gas natural, es muy recomendable poner en práctica algunos consejos y trucos que te ayudarán a optimizar su consumo. De este modo, podrás mantener la temperatura ideal en tu vivienda al tiempo que reduces la factura.
Toma nota de estos sencillos hábitos con los que conseguir un uso más eficiente del gas natural en calefacción y agua caliente:
- Calefacción eficiente gracias a un buen aislamiento y ventilación
Una de las claves para gastar menos en calefacción es tener una buena aislación térmica en casa. Revisa que ventanas y puertas cierren bien para evitar pérdidas de calor. Además, no tapes los radiadores con muebles u otros objetos que impidan la correcta difusión del calor.
Otro aspecto importante es la ventilación, ya que una casa sin ventilar puede acumular humedad y moho. Abre las ventanas 5-10 minutos al día para renovar el aire, pero evita que se enfríe mucho la vivienda.
- Utiliza programadores horarios en la caldera
Los programadores o termostatos horarios para calderas de gas natural te permiten controlar los periodos de funcionamiento de la calefacción. De esta manera, puedes ahorrar energía al indicar las horas del día en que necesitas que esté encendida y las que puede permanecer apagada.
Por ejemplo, programando la caldera para que se encienda solo un par de horas por la mañana y por la noche evitarás un gasto innecesario.
- Elige una temperatura adecuada y constante
Es recomendable fijar una temperatura constante entre los 19oC y 21oC. De este modo, no será necesario calentar la vivienda tras periodos de enfriamiento y se consumirá menos.
Del mismo modo, evita cambios bruscos de temperatura de un día para otro. Lo ideal es modificar progresivamente, para adaptarse a las necesidades de cada momento.
- Revisa y limpia frecuentemente radiadores y filtros
Para un buen rendimiento del sistema de calefacción, es esencial limpiar los radiadores del polvo acumulado y purgarlos para eliminar el aire.
También debes revisar y limpiar periódicamente el filtro de la caldera de gas, ya que la suciedad y las partículas pueden obstruirlo y reducir su eficiencia.
- Instala válvulas termostáticas en radiadores
Las válvulas termostáticas permiten controlar la temperatura de cada radiador de manera independiente. De este modo, solo se alcanzará la temperatura deseada en las estancias que se estén utilizando, optimizando el consumo.
- Aprovecha al máximo el agua caliente
En cuanto al agua caliente sanitaria, algunas recomendaciones útiles son ducharse en lugar de bañarse, cerrar bien los grifos, o reparar posibles fugas que derrochen agua y energía.
También puedes instalar perlizadores para reducir el caudal sin notarlo o aprovechar el calor residual apagando la caldera algo antes de lo habitual.
¿Por qué realizar revisiones oficiales periódicas en instalaciones de gas?
Las instalaciones receptoras de gas natural deben pasar revisiones periódicas obligatorias para verificar su correcto funcionamiento y detectar posibles fugas o anomalías.
De este modo, se garantiza la seguridad de personas y bienes, y se previenen accidentes.
Principales razones para pasar las revisiones oficiales:
- Cumplir la ley: el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE) establece la obligatoriedad de estas inspecciones periódicas en función del tipo de instalación.
- Prevenir accidentes graves como explosiones, incendios o intoxicaciones.
- Detectar fugas, averías o un mal funcionamiento de los aparatos.
- Garantizar la eficiencia y el rendimiento óptimos de la instalación de gas.
- Alargar la vida útil de calderas y demás componentes.
- Obtener el certificado de inspección que acredite la revisión para presentar a la compañía suministradora.
Recomendaciones sobre las inspecciones reglamentarias de gas
Las revisiones de gas son obligatorias por ley y deben realizarse cada cuatro o cinco años, dependiendo del tipo de instalación y del suministrador. Estas revisiones consisten en comprobar el estado y el funcionamiento de los elementos que componen la instalación: tuberías, llaves, contadores, reguladores, calderas, etc.
Recuerda que las revisiones oficiales de gas solo pueden realizarlas empresas autorizadas por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), como Instalaciones LAG. Esta empresa ofrece un servicio completo de gas, y cuenta con personal cualificado y certificado que garantiza un servicio profesional y seguro.
Si estás buscando una empresa experta en gas natural y calefacción, Instalaciones LAG es tu mejor opción, con más de 20 años de experiencia en el sector, que te ofrece servicios completos de gas natural para tu hogar.
