Procedimiento de rellenos dermicos

Rellenos dérmicos ¿La clave para un rostro más joven y radiante?

Los rellenos dérmicos faciales, como el ellanse o el aumento de labios, se han posicionado como uno de los tratamientos estéticos más solicitados para combatir los signos del envejecimiento. Estas inyecciones de sustancias como el ácido hialurónico permiten rellenar arrugas y recuperar volúmenes perdidos en diferentes zonas del rostro, pero, ¿realmente pueden ayudarnos a detener el paso del tiempo? En este artículo te lo contamos todo.

Tipos de rellenos dérmicos 

Existen diversos tipos de rellenos faciales, cada uno con características, componentes y duraciones diferentes:

Ácido hialurónico 

Es uno de los rellenos más populares y conocidos por lograr resultados naturales y por su capacidad de ser absorbido gradualmente por el organismo, por lo que requiere retoques periódicos.

Rellenos permanentes 

Estos productos a base de ingredientes sintéticos pueden ofrecer resultados más duraderos, de hasta 2 años. Sin embargo, conllevan mayores riesgos de efectos adversos como reacciones inflamatorias tardías, desplazamiento del material hacia otras zonas del rostro, endurecimiento del área tratada, dificultad para corregir resultados no deseados.

Rellenos semipermanentes 

Son una opción intermedia, con una duración de 12-18 meses y permiten un efecto rejuvenecedor más prolongado que el ácido hialurónico. Entre ellos destaca el ellanse, un producto cada vez más solicitado.

La ventajas principales de este tipo de rellenos es obtener mayor duración que los rellenos temporales, estimulan la producción natural de colágeno, los resultados son más graduales y naturales, requiere menor frecuencia de retoques al año, y tiene mejor relación costo-beneficio a mediano plazo.

Frecuencia de retoque 

La frecuencia ideal para retocar los rellenos varía según el tipo de producto y la zona tratada. Los rellenos a base de ácido hialurónico suelen durar entre 6 meses y 1 año, mientras que los permanentes pueden mantenerse hasta 2 años.

Es importante seguir las indicaciones de tu médico estético y no exceder los plazos recomendados, ya que aplicar los rellenos con demasiada frecuencia puede alterar la anatomía natural del rostro.

Efectos secundarios y riesgos 

Si bien los rellenos faciales pueden ofrecer resultados favorables, también conlleva algunos efectos secundarios y riesgos a tener en cuenta:

  • Hinchazón, enrojecimiento y hematomas: Es normal experimentar una inflamación temporal en la zona de aplicación, que suele desaparecer en unos días.
  • Reacciones alérgicas: En raras ocasiones, el organismo puede reaccionar de forma adversa al producto inyectado, causando irritación e inflamación.
  • Migración del relleno: En algunos casos, el material inyectado puede desplazarse a otras áreas del rostro, alterando la armonía facial.

Por ello, es crucial recurrir a un médico especialista que evalúe tus necesidades y aplique la técnica y dosis adecuadas, reduciendo así los riesgos.

Cuidados posteriores 

Después de someterte a un tratamiento de rellenos, debes seguir algunas recomendaciones para favorecer una recuperación óptima:

  • Durante los primeros días es importante evitar ejercicios intensos y exposición prolongada al sol, ya que pueden aumentar la inflamación.
  • Conservar una buena limpieza de la piel en la zona tratada ayudará a prevenir infecciones.
  • Si presentas dolor, deformidad o dificultad para mover el rostro, acude de inmediato a tu médico.
Factores a considerar

Antes de decidir tomar un tratamiento de rellenos, es importante tener en cuenta varios aspectos:

Expectativas realistas 

Los rellenos no pueden detener por completo el envejecimiento, pero sí pueden ayudarte a lucir más joven y fresca temporalmente. Es importante mantener una perspectiva realista sobre los resultados.

Compatibilidad del producto  

Algunos tipos de rellenos pueden generar reacciones alérgicas o incompatibilidades en determinadas personas. Tu médico debe evaluar tu historial médico y recomendar la opción más adecuada.

Seguimiento a largo plazo 

Dado que los rellenos deben retocarse periódicamente, es crucial mantener un seguimiento continuo con tu médico estético para garantizar la seguridad y eficacia a largo plazo.

Costos y presupuesto 

Los tratamientos de rellenos pueden tener un costo considerable, por lo que es importante contemplarlo dentro de tu planificación financiera.

Al sopesar todos estos factores, podrás tomar una decisión informada sobre si los rellenos dérmicos son la mejor alternativa para ti.

Los rellenos dérmicos faciales pueden ser una alternativa efectiva para recuperar un aspecto más joven y vital. Sin embargo, es fundamental elegir un buen profesional, respetar los plazos de retoque y estar atento a cualquier efecto adverso, solo así podrás disfrutar de resultados naturales y duraderos, sin poner en riesgo tu salud ni tu apariencia.

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