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Practicar deporte es excelente para la salud física y mental. Pero si no se entrena con precaución o sin una buena preparación, pueden aparecer lesiones.
Las lesiones deportivas son una causa frecuente de visitas al fisioterapeuta. Afectan tanto a deportistas profesionales como a personas que entrenan por afición. Por eso, es clave conocer las más comunes y cómo actuar a tiempo.
Aquí te explico las 7 lesiones más frecuentes en el deporte, cómo prevenirlas y qué papel juega la rehabilitación deportiva en cada caso. Rehabilita tu cuerpo y vuelve más fuerte a tu deporte favorito.
1. Esguince de tobillo
El esguince de tobillo ocurre cuando los ligamentos que estabilizan la articulación se estiran o se rompen. Es muy frecuente en deportes de contacto, fútbol, baloncesto o running.
Síntomas:
- Dolor intenso al pisar.
- Inflamación rápida.
- Moretones y sensación de inestabilidad.
Prevención:
- Fortalecer tobillos y gemelos.
- Usar calzado adecuado.
- Evitar terrenos irregulares.
Tratamiento:
Reposo, hielo, compresión y elevación (método RICE). En casos moderados o graves, es necesaria una fase de rehabilitación de lesiones musculares y ligamentosas con fisioterapia.
2. Tendinitis rotuliana
Conocida como “rodilla del saltador”, esta lesión afecta al tendón que une la rótula con la tibia. Suele aparecer por sobreuso en deportes que implican salto o carrera.
Síntomas:
- Dolor debajo de la rótula.
- Molestias al saltar, correr o subir escaleras.
- Sensación de rigidez o debilidad.
Prevención:
- Estirar cuádriceps e isquiotibiales.
- Fortalecer los músculos del muslo.
- Controlar el volumen de entrenamiento.
Tratamiento:
Reposo relativo, hielo y ejercicios excéntricos. La fisioterapia deportiva acelera la recuperación mediante estiramientos, electroterapia y masaje profundo.
3. Desgarro muscular
También llamado rotura fibrilar, el desgarro aparece cuando las fibras de un músculo se rompen por un esfuerzo intenso o mal calentamiento.
Síntomas:
- Dolor agudo e inmediato.
- Sensación de “latigazo”.
- Hematoma y dificultad para mover la zona.
Prevención:
- Calentar bien antes del ejercicio.
- Realizar estiramientos después.
- Mantener una rutina de fuerza.
Tratamiento:
Requiere reposo inicial, aplicación de hielo y evaluación profesional. Un programa progresivo de rehabilitación deportiva es clave para volver al deporte sin recaídas.
4. Epicondilitis lateral (codo de tenista)
Esta lesión afecta a los tendones que conectan los músculos del antebrazo con la parte externa del codo. Es típica en deportes de raqueta, pero también en golfistas o entrenamientos de fuerza.
Síntomas:
- Dolor en el lateral del codo.
- Dificultad para agarrar objetos.
- Irradiación hacia el antebrazo.
Prevención:
- Técnica deportiva adecuada.
- Fortalecimiento del antebrazo.
- Descanso en fases de sobrecarga.
Tratamiento:
Reposo, fisioterapia con ultrasonidos, ejercicios específicos y corrección del gesto deportivo. El tratamiento de lesiones deportivas debe ser individualizado.
5. Lesión del ligamento cruzado anterior (LCA)
Una de las lesiones más graves en deportes como fútbol, esquí o balonmano. El ligamento cruzado anterior se rompe por giros bruscos o impactos.
Síntomas:
- Chasquido audible.
- Dolor fuerte e hinchazón inmediata.
- Sensación de que la rodilla «falla».
Prevención:
- Fortalecer cuádriceps e isquiotibiales.
- Mejorar la técnica y el equilibrio.
- Usar calzado específico.
Tratamiento:
Puede requerir cirugía. Tras la operación, es clave la rehabilitación postquirúrgica, con fases bien estructuradas que incluyen movilidad, fuerza, propiocepción y retorno al deporte.
Evita que una lesión se vuelva crónica con atención temprana y eficaz.
6. Fracturas por estrés
Son pequeñas grietas en los huesos causadas por sobrecarga repetida, sin impacto directo. Aparecen en corredores, bailarines o deportistas que aumentan su entrenamiento de forma brusca.
Síntomas:
- Dolor localizado que aumenta con la actividad.
- Mejora en reposo.
- Sensibilidad al tacto.
Prevención:
- Incrementar el volumen de forma gradual.
- Asegurar una nutrición adecuada.
- Variar los entrenamientos.
Tratamiento:
Reposo absoluto por semanas. En fases posteriores, se inicia una readaptación deportiva con ejercicios controlados, trabajo de core y carga progresiva.
7. Luxación de hombro
Esta lesión ocurre cuando el hueso del brazo se sale de su sitio en la articulación del hombro. Es común en deportes de contacto, natación o balonmano.
Síntomas:
- Dolor muy fuerte.
- Imposibilidad de mover el brazo.
- Deformidad visible.
Prevención:
- Fortalecer la musculatura del hombro.
- Mejorar la estabilidad escapular.
- Evitar gestos arriesgados si ya hubo una luxación.
Tratamiento:
Se debe colocar el hombro con ayuda médica. Luego se realiza una fase de rehabilitación de lesiones musculares y articulares para evitar nuevas luxaciones.
Las lesiones deportivas son comunes, pero muchas se pueden evitar con una buena preparación, técnica correcta y trabajo preventivo. Cuando ocurren, es fundamental actuar rápido y contar con un plan de rehabilitación deportiva adaptado.
Un buen fisioterapeuta o especialista en tratamiento de lesiones deportivas no solo alivia el dolor, sino que te ayuda a volver más fuerte y seguro al deporte que amas. Consulta con un especialista y vuelve a entrenar sin miedo a recaídas.