Un mantenimiento de equipos eficiente y bien planificado es esencial para garantizar el buen funcionamiento y rendimiento de cualquier empresa o industria. Llevar a cabo un adecuado mantenimiento preventivo de los equipos resulta más económico que tener que realizar constantes reparaciones o cambios por averías y puede suponer grandes ahorros a medio y largo plazo.
AUFER ya cumple 25 años especializados en la distribución de productos de flexografía, huecograbado, así como en el mantenimiento de maquinaria y equipos industriales. Conocen la importancia de realizar un correcto mantenimiento preventivo para alargar la vida útil de la maquinaria y evitar costosas reparaciones. Estas son algunas de las claves para realizar un mantenimiento de equipos eficiente y rentable:
#1 Anticiparse a posibles averías
Un buen plan de mantenimiento comienza por anticiparse y prevenir posibles averías antes de que sucedan, en lugar de esperar a que ocurran para entonces tener que realizar una reparación. Esto se puede lograr mediante un calendario de mantenimiento preventivo donde se revisen de forma regular diferentes componentes y sistemas.
Por ejemplo, en sistemas eléctricos una revisión periódica de los cuadros eléctricos puede detectar cables desgastados, conexiones sueltas u otros problemas que podrían derivar en cortocircuitos o sobrecalentamientos. Del mismo modo, la revisión regular de piezas móviles como correas, rodamientos o engranajes permite detectar el desgaste antes de que se rompan o atasquen.
#2 Revisiones y planes de mantenimiento
Es importante tener documentado un plan de mantenimiento donde se detalle el tipo de revisiones y su frecuencia para los diferentes equipos y componentes. Este plan debe basarse generalmente en las recomendaciones del fabricante en cuanto a mantenimiento preventivo según el uso y características de cada equipo.
Por ejemplo, para las máquinas de flexografía se recomiendan revisiones de los diferentes sistemas mecánicos, eléctricos, neumáticos o de tinta al menos una vez al semestre. Los controles numéricos, sistemas electrónicos y otros equipos más delicados pueden precisar revisiones trimestrales.
#3 Designar responsables
Otro aspecto clave es designar a las personas responsables de supervisar y llevar a cabo los planes de mantenimiento. Esto garantiza que se realicen las tareas indicadas en los tiempos previstos y permite llevar un registro del historial de revisiones de cada equipo.
La persona designada debe tener los conocimientos técnicos necesarios, ya sea de mecánica, electricidad, electrónica o de la especialidad requerida según los equipos. En casos complejos se puede recurrir al servicio técnico del fabricante.
#4 Mantenimientos predictivos
El mantenimiento predictivo es un paso más allá del preventivo y permite conocer el estado real de los equipos mediante la medición y análisis de parámetros para detectar posibles fallos incluso antes de que aparezcan síntomas.
Por ejemplo, un análisis de vibraciones de motores o una termografía de cuadros eléctricos pueden detectar pequeñas fisuras o sobrecalentamientos que, de otra forma, pasarían desapercibidos hasta producir un fallo mayor. Detectar estas incidencias a tiempo permite planificar la reparación para el momento más oportuno evitando paradas no programadas.
#5 Formación continuada
Mantener formado al personal técnico tanto en el manejo de los equipos como en tareas de mantenimiento es un aspecto también importante. Una plantilla bien formada, implicada y con experiencia será capaz de detectar posibles fallos o mejoras en los equipos que otros pasarían por alto.
Desde luego, en muchos casos será necesario contar con el servicio técnico especializado del fabricante para los mantenimientos más complejos o tareas como calibraciones anuales. Pero una plantilla propia formada puede asumir gran parte de las rutinas de mantenimiento preventivo.
#6 Gestión eficiente de repuestos y consumibles
Tener bien planificada la compra y gestión de repuestos y consumibles como lubricantes, grasas, filtros, correas y otros materiales de mantenimiento repercute también en la eficiencia.
Mantener un registro de los elementos consumidos por cada equipo y planificar su reposición periódica evita pasar a tener un equipo parado por falta de un repuesto aparentemente insignificante. En algunos casos conviene incluso tener stock de los repuestos más críticos para poder sustituirlos de inmediato cuando se detecten próximos al final de su vida útil en las revisiones de mantenimiento.
En definitiva, un adecuado plan de mantenimiento preventivo implantado por personal técnico formado y el uso de técnicas de mantenimiento predictivo son las claves para realizar un mantenimiento de equipos eficiente y rentable como, por ejemplo, desde AUFER llevamos años realizando para diferentes líneas de flexografía, huecograbado o cuadros eléctricos con nuestro propio servicio técnico especializado.
¿Necesitas ayuda con el mantenimiento de tus equipos? Ponte en contacto con los técnicos de AUFER y te ayudarán a diseñar un plan a medida para tus necesidades.